La Trinidad

 

Génesis 1:1-2  

1 En el principio creó Dios los cielos y la tierra. 2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

Juan 1:1-3; 10; 14

 

1 En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios. 2 Este era en el principio con Dios. 3 Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho.

10 En el mundo estaba, y el mundo por él fue hecho; pero el mundo no le conoció.

14 Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad.

 

El DIOS Trino

La palabra Trinidad viene del latín trinitas formada del adjetivo latino trinus (de tres), con la raíz tri- (tres, como en tribu y triceps), el sufijo - inus (pertenencia, como en felino y mediastino) más el sufijo -tat (-dad, cualidad, como en deidad, diversidad y probabilidad). La Trinidad es el dogma central sobre la naturaleza de DIOS en la mayoría de las iglesias cristianas. Esta creencia afirma que DIOS es un ser único que existe como tres personas distintas o hipóstasis: el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. La doctrina de la Trinidad significa que el eterno DIOS es tres en persona y uno en esencia: la persona del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.

Introducción

¿Debo creer en la Trinidad?

La Trinidad es uno de los misterios más profundos y fascinantes de la fe cristiana. Se trata de la creencia de que DIOS es uno solo, pero al mismo tiempo se revela como tres personas distintas: el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. ¿Cómo podemos entender este dogma? ¿Qué dice la Biblia al respecto? ¿Qué implicaciones tiene para nuestra vida espiritual?

En este artículo intentaremos responder a estas preguntas de una manera sencilla y clara, basándonos en las fuentes bíblicas y en la tradición de la Iglesia. No pretendemos agotar el tema, sino ofrecer una introducción que nos ayude a conocer mejor a DIOS y a amarlo más.

¿Qué es la Trinidad?

La palabra Trinidad significa "tres en uno". Es un término que no aparece en la Biblia, pero que fue acuñado por los primeros cristianos para expresar la realidad de DIOS tal como se revela en las Escrituras. La Trinidad es el dogma central del cristianismo, que afirma que DIOS es un ser único que existe como tres personas distintas o hipóstasis: el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Estas tres personas son coeternas, consustanciales y coiguales, es decir, tienen la misma naturaleza divina, el mismo poder y la misma gloria.

La Trinidad no es una contradicción lógica, sino un misterio sobrenatural que supera nuestra capacidad humana de comprensión. No podemos explicar cómo DIOS es uno y trino al mismo tiempo, pero podemos creerlo por fe, confiando en Su Palabra revelada. La Trinidad no es una invención humana, sino una verdad divina que nos ha sido dada a conocer por DIOS mismo.

¿Qué dice la Biblia sobre la Trinidad?

La Biblia no nos ofrece una definición sistemática de la Trinidad, pero nos muestra cómo DIOS se ha manifestado como Padre, Hijo y Espíritu Santo a lo largo de la historia de la salvación. Podemos encontrar indicios de la Trinidad ya en el Antiguo Testamento, por ejemplo, cuando DIOS dice: "Hagamos al hombre a nuestra imagen, según nuestra semejanza" (Gn 1:26), usando el plural para referirse a Sí mismo. También cuando aparecen tres ángeles que representan a DIOS ante Abraham (Génesis 18) o cuando se habla del Espíritu de Dios que se mueve sobre las aguas (Génesis 1:2) o que inspira a los profetas (Isaías 61:1).

Sin embargo, la plena revelación de la Trinidad se da en el Nuevo Testamento, con la Encarnación del Hijo de DIOS y el envío del ESPÍRITU SANTO. JESÚS se presenta como el Hijo único de DIOS, que viene del Padre y vuelve al Padre (Juan 14:28), que hace las obras del Padre y habla las palabras del Padre (Juan 5:19-20), que tiene el mismo nombre que el Padre (Juan 10:30) y que recibe la misma adoración que el Padre (Juan 20:28). JESÚS también promete enviar al ESPÍRITU SANTO, que procede del Padre y del Hijo (Juan 15:26), que les enseñará toda la verdad (Juan 16:13) y que les dará poder para ser sus testigos (Hechos 1:8). JESÚS ordena bautizar a sus discípulos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo (Mateo 28:19), mostrando así la igualdad y la unidad de las tres personas divinas.

Los escritores del Nuevo Testamento también dan testimonio de la fe trinitaria de la Iglesia primitiva, al invocar la bendición de las tres personas divinas (2 Cor. 13:13), al atribuirles obras comunes como la creación (Col 1:16-17; Hb 1:2; Gn 1:2), la redención (Efesios 1:3-14; Tito 3:4-7; 1 Pedro 1:2) y la santificación (1 Co 12:4-6; Efesios 4:4-6; 1 Pedro 4:14), y al reconocerles atributos divinos como la eternidad (Hebreos 9:14; Apoc. 1:8; 22:13), la Omnipotencia (Lucas 1:37; Mateo 28:18; Rom 15:19), la Omnisciencia (Juan 21:17; Juan 16:30; 1 Cor 2:10-11) y la Omnipresencia (Mateo 18:20; Efesios 4:10; Salmo 139:7).

¿Qué implicaciones tiene la Trinidad para nuestra vida espiritual?

La Trinidad no es solo una doctrina abstracta, sino una realidad viva que nos invita a entrar en comunión con DIOS y con los demás. Al creer en la Trinidad, reconocemos que DIOS es amor (1 Juan 4:8), que se entrega y se comunica entre las tres personas divinas, y que nos llama a participar de su vida íntima. Al creer en la Trinidad, también reconocemos que DIOS es salvación (Juan 3:16), que nos ha amado tanto que ha enviado a su Hijo para morir por nosotros y a su Espíritu para vivificar.

DIOS es Uno

El cristianismo es una religión monoteísta, lo que significa que creen en un solo Dios, como se revela en el Antiguo Testamento.

Tres personas en una sola naturaleza divina

 La Trinidad enseña que Dios existe como tres personas distintas: Dios Padre, Dios Hijo (Jesucristo) y Dios Espíritu Santo. Cada una de estas personas es completamente divina y coexisten eternamente como una unidad inseparable.

Coeternidad y Coigualdad

Las tres personas de la Trinidad son igualmente divinas, eternas y no hay una que sea superior a las otras. Cada una posee la plenitud de la Deidad y, sin embargo, no se dividen ni se separan entre sí.

Relación y función distintas

Una analogía frecuentemente utilizada para intentar ilustrar este concepto, que además es una blasfemia y herejía, es el agua en sus tres estados: sólido (hielo), líquido (agua) y gas (vapor). Dicho punto de vista tan extendido en la religión evangélica y católica, que aunque tienen diferentes formas y propiedades, siguen siendo agua en su esencia. Sin embargo, es importante tener en cuenta que ninguna analogía puede capturar completamente la complejidad de la Trinidad, ya que es un misterio divino que supera la comprensión humana, incluyendo también a las herejes definiciones de los Testigos de Jehová, de los unitarios y pentecostales.

Es importante tener cuidado al explicar la Trinidad para evitar caer en el error del triteísmo (creer en tres dioses separados) o del modalismo (creer que DIOS cambia de una persona a otra en diferentes momentos). La doctrina de la Trinidad es un tema de profundo estudio y reflexión teológica dentro del cristianismo.

Antecedentes

Visión General

La doctrina cristiana de la Trinidad es uno de los temas más complejos y misteriosos de la teología. Como ya hemos mencionado, se trata de la creencia de que DIOS es uno, pero al mismo tiempo se manifiesta en tres personas distintas: el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Esta doctrina ha sido objeto de debate y controversia a lo largo de la historia de la Iglesia, y ha generado diversas interpretaciones y explicaciones. Intentaremos presentar una visión general de lo que significa la Trinidad, cuáles son sus fundamentos bíblicos y cómo se ha desarrollado históricamente.

Génesis 1: 26-27

   “Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre A NUESTRA IMAGEN, CONFORME A NUESTRA SEMEJANZA...; Y creó Dios al hombre A SU IMAGEN, A IMAGEN DE DIOS lo creó; varón y hembra los creó.”

Es importante destacar que la doctrina de la Trinidad es específica del cristianismo y no se encuentra en otras religiones abrahámicas como el judaísmo o el islam. Además, esta doctrina ha sido objeto de debate y discusión en la historia del cristianismo, y aunque es aceptada por la mayoría de las denominaciones cristianas, hay algunas corrientes teológicas que han interpretado de manera diferente la relación entre las tres personas divinas.

La palabra "Trinidad" no aparece en la Biblia, pero sí se encuentran numerosas referencias a la unidad y diversidad de DIOS. Por ejemplo, en el Antiguo Testamento se usa el término hebreo "Elohim" para referirse a DIOS, que es un plural mayestático que implica majestad y plenitud. También se encuentran pasajes donde DIOS habla en primera persona del plural, como en el pasaje anterior de Génesis 1:26: "Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza". En el Nuevo Testamento, se revela más claramente la distinción entre las tres personas divinas, especialmente en los evangelios y las cartas de Pablo. Por ejemplo, en Mateo 28:19, JESÚS ordena a sus discípulos: "Id, pues, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo". En 2 Corintios 13:14, Pablo concluye su carta con una bendición trinitaria: "La gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios, y la comunión del Espíritu Santo sean con todos vosotros", un pasaje que la organización de los Testigos de Jehová modifican como algunos otros más, en su biblia adaptada.

La doctrina de la Trinidad afirma que hay un solo DIOS verdadero y eterno, que existe en tres personas coeternas y coiguales, que se relacionan entre sí en amor y gloria. Cada persona tiene su propia identidad y función, pero no son tres dioses separados ni partes de un mismo DIOS. El Padre es la fuente y el origen de todo lo creado, el Hijo es el Verbo encarnado que se hizo hombre para salvarnos por su muerte y resurrección, y el Espíritu Santo es el aliento de vida que nos santifica y nos guía a toda verdad. La Trinidad es un misterio que supera nuestra razón humana, pero que podemos conocer por la revelación divina y la fe.

La doctrina de la Trinidad se fue formulando progresivamente a lo largo de los primeros siglos de la Iglesia, en respuesta a los desafíos y herejías que surgieron sobre la naturaleza de DIOS y de CRISTO (lea en este mismo blog la Unión Hipostática).

Algunos negaban la divinidad del Hijo o del Espíritu Santo, otros afirmaban que eran seres creados o inferiores al Padre, otros sostenían que eran modos o manifestaciones temporales de un mismo Dios. Para defender la fe apostólica y evitar confusiones o distorsiones, los concilios ecuménicos establecieron las definiciones dogmáticas sobre la Trinidad, basadas en las Escrituras y en la tradición. Los principales concilios que trataron este tema fueron el de Nicea (325 d.C.), que afirmó que el Hijo es consustancial (de la misma naturaleza) al Padre; el de Constantinopla (381 d.C.), que afirmó que el Espíritu Santo es Señor y procede del Padre; el de Efeso (431 d.C.), que afirmó que Cristo es una sola persona con dos naturalezas (divina y humana); y el de Calcedonia (451 d.C.), que afirmó que las dos naturalezas de Cristo son inseparables e inconfundibles.

La doctrina de la Trinidad es fundamental para comprender quién es DIOS y cómo se relaciona con nosotros. Nos revela que DIOS es amor (1 Juan 4:8), que nos ha creado por amor y para amar, que nos ha redimido por amor y nos llama a participar de su vida eterna. Nos revela también que somos imagen de DIOS (Génesis 1:27), llamados a vivir en comunión con ÉL y con los demás. Nos revela finalmente que somos templo del ESPÍRITU SANTO (1 Corintios 6:19), que nos da sus dones y fruto para crecer en santidad y dar testimonio del Evangelio. La Trinidad es, pues, el modelo y la meta de nuestra vida cristiana.

Negaciones

Controversias

La negación de la Trinidad es una posición teológica sostenida por ciertos grupos religiosos, especialmente aquellos que se identifican con el unitarismo o el monoteísmo estricto. La Trinidad es una doctrina cristiana que describe a DIOS como una única deidad en tres personas: Padre, Hijo (Jesucristo) y Espíritu Santo.

Es importante señalar que la negación de la Trinidad no es representativa de la creencia cristiana tradicional, que considera la Trinidad como una verdad fundamental de su fe. Aun así, algunos de los argumentos que han sido presentados por aquellos que niegan la Trinidad son los siguientes:

Monoteísmo estricto: Los opositores de la Trinidad argumentan que la idea de tres personas en un solo Dios es incompatible con el concepto de un monoteísmo puro. Según su perspectiva, Dios debe ser una entidad indivisible y no puede manifestarse en diferentes personas o formas.

1.      Falta de términos bíblicos específicos: Los críticos de la Trinidad sostienen que el término "Trinidad" no aparece en la Biblia y que las explicaciones detalladas de esta doctrina se desarrollaron en los primeros siglos después de CRISTO. Argumentan que la falta de términos y descripciones explícitas en la Biblia sugiere que la Trinidad no es una enseñanza genuina de JESÚS o de los apóstoles.

2.      Énfasis en la unidad de DIOS: Los unitaristas afirman que el mensaje bíblico enfatiza repetidamente la unidad y unicidad de DIOS. Citan versículos como Deuteronomio 6:4, que dice: "Escucha, Israel: Jehová nuestro Dios, Jehová uno es", como una afirmación de la unicidad absoluta de DIOS.

3.      Identificación de Jesucristo como un ser creado: Los que rechazan la Trinidad ven a JESUCRISTO como el Hijo de DIOS, pero niegan que sea coeterno con el Padre. Argumentan que JESÚS es una creación divina y una entidad subordinada al Padre, pero no es DIOS mismo.

4.      Desafíos lógicos y conceptuales: Algunos críticos encuentran dificultades lógicas y conceptuales en la idea de una Trinidad, como la noción de cómo tres personas pueden ser una sola entidad o cómo Jesús puede ser plenamente DIOS y plenamente humano al mismo tiempo.

Es importante destacar nuevamente que la doctrina de la Trinidad es ampliamente aceptada por la mayoría de las denominaciones cristianas y se considera uno de los pilares centrales de la teología cristiana. La negación de la Trinidad representa una minoría de puntos de vista dentro del cristianismo y es considerada una posición teológica controvertida.

Conceptos Teológicos

Que se nos dice de la Trinidad

Hemos estado estudiando que la doctrina de la Trinidad, también conocida como el dogma trinitario, es uno de los pilares fundamentales del cristianismo, ya que describe la naturaleza de DIOS como una realidad compleja pero unificada que existe en tres personas distintas: Dios Padre, Dios Hijo (Jesucristo) y Dios Espíritu Santo.

Sin embargo, también es una de las más difíciles de comprender y explicar. A lo largo de la historia, ha habido muchas controversias acerca de la naturaleza y el significado de la Trinidad, tanto dentro como fuera de la iglesia cristiana.

La Trinidad se refiere a la creencia de que DIOS es uno solo, pero existe en tres personas distintas: el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Estas tres personas son coeternas, coiguales y consustanciales, es decir, comparten la misma esencia divina. La Trinidad no es una contradicción lógica, sino un misterio que sobrepasa la capacidad humana de comprensión plena.

Algunas de las controversias acerca de la Trinidad se remontan a los primeros siglos del cristianismo, cuando surgieron diversas herejías que negaban o distorsionaban algún aspecto de la doctrina trinitaria. Por ejemplo, el arrianismo afirmaba que el Hijo era una criatura inferior al Padre y que hubo un tiempo en que no existía. El modalismo sostenía que DIOS se manifestaba en diferentes modos o formas, pero no en personas reales. El subordinacionismo enseñaba que el Hijo y el Espíritu Santo eran subordinados al Padre en rango y autoridad.

Estas herejías fueron refutadas por los concilios ecuménicos y los padres de la iglesia, que establecieron las definiciones ortodoxas de la Trinidad basadas en las Escrituras y la tradición apostólica. Sin embargo, las controversias no cesaron con el tiempo, sino que continuaron apareciendo nuevas interpretaciones y desafíos a la doctrina trinitaria.

Por ejemplo, en la época de la Reforma protestante, hubo algunos grupos que rechazaron la Trinidad por considerarla una invención humana sin fundamento bíblico. Estos grupos fueron llamados antitrinitarios o unitarios, y defendían que DIOS era una sola persona y que JESÚS era un hombre excepcional pero no divino. Algunas denominaciones actuales que se identifican con esta posición son los testigos de Jehová, los mormones y los unitarios universalistas.

Otra controversia reciente se relaciona con el uso del lenguaje inclusivo para referirse a las personas de la Trinidad. Algunos cristianos argumentan que el lenguaje tradicional de Padre e Hijo es sexista y excluyente, y proponen usar términos más neutros o metafóricos, como Creador, Redentor y Sustentador. Otros cristianos sostienen que el lenguaje bíblico de Padre e Hijo revela aspectos esenciales de la relación entre las personas divinas y no debe ser alterado por motivos culturales o ideológicos.

Estas son solo algunas de las controversias acerca de la Trinidad que han surgido a lo largo de la historia del cristianismo. A pesar de las diferencias y los debates, lo cierto es que la Trinidad es una doctrina fundamental para la fe cristiana, pues expresa el amor, la comunión y la diversidad de DIOS, así como su obra salvadora en el mundo.

A continuación, presentamos una explicación sobre este concepto teológico:

1.      Evidencia bíblica: Aunque la palabra "Trinidad" no se encuentra en la Biblia, los cristianos han llegado a esta comprensión a través de diversas afirmaciones y enseñanzas encontradas en las Escrituras. Algunos pasajes clave incluyen:

o    El bautismo de Jesús: En Mateo 3:16-17, se describe cómo, al ser bautizado, JESÚS sale del agua, el ESPÍRITU SANTO desciende sobre ÉL en forma de paloma, y una voz desde los cielos proclama: "Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia".

o    La Gran Comisión: En Mateo 28:19, JESÚS instruye a sus discípulos a bautizar a todas las naciones "en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo".

o    Doxologías trinitarias: En diferentes lugares de las epístolas del Nuevo Testamento, se encuentran expresiones que mencionan a las tres personas divinas conjuntamente, como en 2 Corintios 13:14 y Efesios 4:4-6, así como otras Escrituras que hemos tomado en el presente artículo.

2.      Desarrollo histórico: Como lo hemos destacado, la comprensión de la Trinidad se fue desarrollando a lo largo de los primeros siglos del cristianismo. Hubo debates y controversias, como el arrianismo, del que hemos expuesto que negaba la plena divinidad de JESÚS. Estas controversias llevaron a la formulación y defensa de la doctrina trinitaria en varios concilios ecuménicos, siendo el Concilio de Nicea en el año 325 d.C. y el Concilio de Constantinopla en el año 381 d.C. los más significativos. En estos concilios, se estableció la formulación básica de la doctrina trinitaria y se reafirmó la creencia en la divinidad coeterna y coigual de las tres personas divinas.

3.      La esencia de la Trinidad:

o    Unidad en la pluralidad: La Trinidad no es un politeísmo, ya que sigue siendo una sola Deidad, pero se manifiesta en tres personas distintas.

o    Coigualdad y coeternidad: Las tres personas de la Trinidad son igualmente divinas y eternas. No hay ninguna que sea más antigua o más poderosa que otra.

o    Distinción en personas: Aunque hay una unidad esencial, cada persona tiene su identidad y función. El Padre no es el Hijo, el Hijo no es el Espíritu Santo, y así sucesivamente.

o    Pericoresis o circumincesión: Este concepto se refiere a la interpenetración mutua de las tres personas divinas. Cada una mora en la otra, relacionándose y compartiendo una comunión perfecta.

4.      Analogías: A veces se utiliza la imagen de un huevo para intentar ilustrar la Trinidad. Un huevo tiene tres partes: la cáscara, la clara y la yema, pero sigue siendo un solo huevo o la del agua que mencionamos párrafos anteriores. Sin embargo, es importante recordar que ninguna analogía es perfecta y que la Trinidad sigue siendo un misterio incomprensible en su totalidad para la mente humana.

A pesar de parecer reiterativos, es importante destacar que la doctrina de la Trinidad es específica del cristianismo así como hemos enfatizado acerca de que esta doctrina ha sido objeto de debate y discusión en la historia del cristianismo independientemente de que  es aceptada por la mayoría de las denominaciones cristianas, hay algunas corrientes teológicas que han interpretado de manera diferente la relación entre las tres personas divinas.

·         Definición de la Trinidad: La Trinidad es la creencia en un DIOS único que existe eternamente como tres personas distintas y coexistentes: DIOS Padre, DIOS Hijo (JESUCRISTO) y DIOS Espíritu Santo. Cada una de estas personas es totalmente divina y comparte la misma esencia divina, sin que haya división en la Deidad.

·         Unidad y Pluralidad: La Trinidad implica una compleja unidad en pluralidad. Aunque hay tres personas, hay un solo DIOS. Esto significa que no hay tres dioses, sino una única Deidad en tres personas.

·         La divinidad de cada persona:

o    Dios Padre: Es el Creador del universo y el Padre eterno. Es a quien JESÚS se refería como su Padre en los Evangelios. Es la primera persona de la Trinidad.

o    Dios Hijo (JESUCRISTO): Es la segunda persona de la Trinidad, quien se encarnó en forma humana, naciendo de María. Es plenamente DIOS y plenamente humano al mismo tiempo. JESUCRISTO vino al mundo para redimir a la humanidad y revelar el carácter y el amor de DIOS.

o    Dios Espíritu Santo: Es la tercera persona de la Trinidad. Es el Consolador, Guía y Ayudante que Jesús JESÚS prometió enviar a los creyentes después de su ascensión. El ESPÍRITU SANTO mora en los corazones de los seguidores de CRISTO para capacitarlos y santificarlos.

·         Igualdad y Eternidad: Cada persona de la Trinidad es eterna y coigual en divinidad. Ninguna es más antigua o más poderosa que la otra. Son una unidad eterna, sin principio ni fin.

·         La Trinidad en la Biblia: La doctrina de la Trinidad se basa en la interpretación de varios pasajes bíblicos que implican la existencia de las tres personas divinas. Algunos de los versículos clave que los cristianos utilizan para apoyar esta enseñanza incluyen los ya mencionados Mateo 3:16-17 y Mateo 28:19, así como Juan 1:1-3, Juan 10:30, Hechos 5:3-4 y 2 Corintios 13:14, entre muchísimos otros.

·         Desarrollo histórico: La comprensión de la Trinidad se fue desarrollando y articulando a lo largo de los primeros siglos del cristianismo, como respuesta a diversas controversias teológicas. Los concilios ecuménicos, como el Concilio de Nicea en 325 d.C. y el Concilio de Constantinopla en 381 d.C., fueron eventos cruciales para establecer y defender la ortodoxia trinitaria.

·         Importancia teológica: La doctrina de la Trinidad es fundamental para la teología cristiana, ya que afecta la comprensión de la naturaleza de DIOS, la obra de la redención a través de JESUCRISTO y la obra del ESPÍRITU SANTO en la vida del creyente.